Cerebral

JC1 Veterinarios resonancia magnética

Este síndrome que ocurre comúnmente, se caracteriza a menudo por movimientos anormales, tales como dar vueltas en círculo (usualmente hacia el mismo lado de la lesión), caminatas continuas de un lado a otro, presión de la cabeza contra la pared ó la jaula.

En algunos animales la cabeza y el tronco pueden estar torcidos (pleurotótonos) hacia el lado de la lesión.

Frecuentemente puede observarse conductas y estado mental alterados: apatía, depresión, estupor, desorientación, falla para reconocer al dueño y al ambiente, pérdida de hábitos aprendidos por entrenamiento (p.e., el lugar donde se defeca y orina), y algunas veces agresión ó hiperexcitabilidad.

Mientras que la marcha puede ser normal, las reacciones de postura como la respuesta de salto, reacomodo de lugar y caminata con los miembros de un lado (hemicaminata) estan normalmente deprimidos en los miembros contralaterales.

En animales que están en coma, la respiración puede caracterizarse por incrementos y disminución de la respiración profunda, con periodos recurrentes regulares de apnea aparente (p.e., la respiración de Cheyne-Stokes), aunque los periodos de "apnea" de hecho reflejan amplitudes respiratorias extremadamente bajas.

La visión puede estar alterada (chocar con los objetos, reflejo de amenaza deprimido) del lado opuesto a la lesión; sin embargo, los reflejos pupilares a la luz son normales.

Pueden observarse convulsiones y papiledema (edema del disco óptico, a menudo debido a presión intracraneal incrementada). Las convulsiones pueden ser:
(a) generalizadas, con pérdida de conciencia y actividad autonómica incontrolada (p.e., salivación, micción, defecación, dilatación de las pupilas, y movimientos masticatorios) función motora anormal (p.e., rigidez muscular, seguida de movimientos de carrera y remo en los miembros),
ó (b) parciales, donde no hay pérdida de conciencia y donde los signos pudieran indicar el sitio focal de la lesión, p.e.,:
- en corteza motora - voltear la cabeza, espasmos en un miembro, persecución de la cola;
- en corteza visual- tratar de morder la luz ó moscas;
- ó en sistema límbico - confusión, agresión, gritos, ataques a objetos inanimados, ó conducta de miedo.
Las convulsiones parciales pueden avanzar y convertirse en convulsiones generalizadas.

Signos principales del síndrome cerebral

  • Marcha normal
  • Estado mental alterado (apatía, depresión, desorientación, letargia, coma)
  • Cambios de conducta (pérdida de hábitos aprendidos, falla para reconocer al dueño, agresión, ó hiperexcitabilidad)
  • Movimientos y posturas anormales como caminatas de un lado a otro, caminatas si rumbo, dar vueltas en círculo, presión de la cabeza contra objetos, cabeza y tronco torcidos (pleurotótonos)
  • Reacciones de postura deficientes en miembros contralaterales
  • Alteración de la visión (p.e., chocar con objetos, deficiencia en la respuesta de amenaza opuesta al lado de la lesión) con reflejos pupilares normales a la luz
  • Convulsiones
  • Papiledema

Enfermedades asociadas con el síndrome cerebral

  • Desórdenes degenerativos Encefalopatía del Husky de Alaska; leucodistrofia del Dálmata; degeneración espongiforme de la materia gris (Salukis); encefalomielopatías orgánicas; acidopatías; encefalopatía del Yorkshire Terrier
  • Desórdenes degenerativos estructurales ó por compresión Ninguna
  • Desórdenes del desarrollo Lisencefalia; hidranencefalia; meningoencefalocele; hidrocefalea
  • Desórdenes metabólicos endógenos Diabetes mellitus; encefalopatía hepática; hipernatremia; hipoglicemia; hiponatremia; hipotiroidismo; encefalopatía urémica; acidosis; alcalosis; hipertiroidismo; hipofosfatemia; hipercalcemia
  • Desórdenes inflamatorios Abscesos; moquillo (Ver notas); encefalitozoonosis (perros); meningoencefalitis eosinofílica; encefalitis por virus de inmunodeficiencia felina; peritonitis infecciosa felina; encefalopatía espongiforme felina; meningoencefalomielitis granulomatosa; hepatitis infecciosa canina; encefalitis por virus La Crosse; enfermedades micóticas; encefalitis del perro viejo; encefalomielitis parasitaria; encefalitis por parvovirus; encefalitis del Pug; rabia; toxoplasmosis y neosporosis
  • Neoplasias Tumores cerebrales
  • Desórdenes neurotóxicos Plantas cianogénicas; toxicidad por etilenglicol; envenenamiento por plomo; metionina; metoclopramida
  • Desórdenes neurovasculares Paro cardiaco; infartos; hemorragias; encefalopatía isquémica felina
  • Desórdenes nutricionales Deficiencia de tiamina
  • Desórdenes de almacenamiento Lipofuscinosis ceroide; fucosidosis; gangliosidosis; leucodistrofia globoide
  • Traumatismos Traumatismo craneal

 

a) En la leucodistrofia del Dálmata, las alteraciones en la conducta no son características.
b) En el síndrome cerebral, puede encontrarse hipoalgesia facial contralateral, probablemente asociada con lesiones de la corteza somatosensorial ó de los sistemas corticales de proyección a partir del tálamo.
c) En la rabia los signos cerebrales usualmente son asociados con la forma "furiosa" y pueden ser muy parecidos a aquellos vistos en perros con encefalitis posvacunal de moquillo canino
d) La meningoencefalocele usualmente es mortal al nacimiento.
e) Los infartos en los animales son raramente vistos asociados con aterosclerosis (xantomatosis arterial) pero cuando ocurren, pueden ser como una complicación de hipotiroidismo (en perros).
f) El coma por mixedema es una forma extremadamente rara de hipotiroidismo descompensado
g) Las causas más comunes de síndrome cerebral vistas en la practica son:
Traumatismo craneal (P + G)
Hidrocefalia (P)
Tumores cerebrales, tales como meningiomas en perros y gatos y gliomas (p.e., astrocitomas, oligodendrogliomas) en perros braquiocefálicos
Encefalopatía hepática (P + G)
Encefalopatía isquémica felina (G)